Durante este verano, la mayoría de las fuentes ornamentales de la ciudad estaban -apagadas" y casi sin mantenimiento.

El coste que supondrá la puesta en marcha de nuevo será altísimo y abre la puerta a una futura privatización de este servicio por parte del PP. Desde ULEG se considera que la situación es reversible en cuanto los vecinos desalojen del gobierno a este alcalde y su incompetente equipo.

Leganés, 1 de octubre de 2014

Unión por Leganés - ULEG el partido independiente y vecinal que cuenta con 12.409 votos y 4 ediles en el Ayuntamiento, denuncia el estado en el que se encuentran las fuentes. La falta de mantenimiento y la desidia del gobierno del PP ha provocado que durante este verano los ciudadanos no hayan podido disfrutar del funcionamiento de las fuentes y que las que aún funcionan se encuentren en un evidente deterioro. El portavoz de Unión por Leganés - ULEG, Carlos Delgado, indicó: -este es un ejemplo de cómo el PP está gestionando nuestra ciudad, reduce el mantenimiento hasta que las cosas dejan de funcionar y todavía se creen grandes gestores. La estampa es desoladora, fuentes sin agua llenas de suciedad y cada día que pasa la degradación aumenta.

La tacañería del PP está deteriorando Leganés a pasos agigantados.

La gestión de la Concejalía de Obras es tan nefasta que entre 2012 y 2013 dejó sin gastar el 54% del presupuesto para el mantenimiento de fuentes y, lo más desolador, en 2013 prefirió gastar 54.000 € en desmontar una en el Paseo de Paquita Gallego. -Da la impresión que esa Concejalía está más preocupada en hacer parques infantiles en las puertas de colegios (donde tienen intereses familiares) privados-concertados a 60.000 € que en dotar de medios a la plantilla o en organizarla de forma racional", explican desde ULEG, que añaden: -A uno se le rompe el corazón cuando se acerca a plazas como la de La Fuente Honda o la rotonda de Leganés y observa las fuentes sin agua o con basura". Es llamativo como en el PP, en la pasada legislatura, se hacía eco del mantenimiento de las fuentes en ruegos reiterados en los plenos, insistiendo, incluso, en la necesidad de instalar depuradoras para el ahorro de agua. Ahora, cuando ellos mandan, nos encontramos con una extrema -tacañería" que hace que el ahorro venga, pero de no gastar en mantenimiento y por no ponerlas ni en funcionamiento, lo que deteriora más la instalación. El problema real se incrementará cuando repararlas sea tan caro que haga inviable incluso su existencia. Esto ya ha ocurrido y se está planteando con varias, como la de la plaza del Milenio, en Campo de Tiro o la de la calle Lisboa en La Fortuna.

El final para estos elementos de nuestra ciudad es bastante macabro. Como ya ha ocurrido, muchas fuentes se desmontarán o el servicio se intentará privatizar incluyéndolo en algún pliego de mantenimiento o de jardinería. ULEG revertirá esta situación cuando gobierne dentro de menos de 8 meses.