Son muchas las acciones y actitudes que demuestran que el Partido Popular de Leganés no cree en la participación vecinal y ciudadana. Con "sutiles" trabas burocráticas se amordaza y dificulta el desarrollo de la actividad habitual de las entidades y asociaciones locales. La última invención: emitir facturas para cobrar por el uso de salas municipales a las entidades ciudadanas. Uso que siempre ha sido gratuito para el fomento de la participación social.
Unión por Leganés-ULEG, principal partido de la oposición en el Ayuntamiento, critica la actitud del gobierno (PP) y su posición beligerante frente al tejido social ya que, según denuncian, está poniendo todo tipo de obstáculos, trabas e impedimentos a las asociaciones y entidades de Leganés. "Son ya muchas las pruebas de este comportamiento desde que el PP llegó al gobierno, y día a día dan un giro de tuerca más para ahogar al movimiento vecinal de nuestra ciudad. La última gran idea es emitir facturas para cobrarles (lo que nunca se ha hecho) por el uso de instalaciones municipales como las salas multiusos. Así ha pasado con, p. ej., la Asociación de Alcohólicos Anónimos de Leganés o la Asociación de vecinos Barrio Centro".
No es un hecho aislado. Para ULEG, las zancadillas a los movimientos sociales son continuas y desde casi todas las concejalías. En siete meses desde el gobierno local han negado la celebración de los más diversos actos o eventos públicos a diversas entidades, se ha querido cobrar el canon a asociaciones a las que se le había cedido una instalación municipal de forma gratuita años atrás, no están desarrollando un nuevo reglamento de participación ciudadana, no presentaron los presupuestos del ayuntamiento a las asociaciones de vecinos, montaron un "show" con las llaves y el acceso al centro Azorín de Vereda de Estudiantes donde se albergan multitud de asociaciones, han tardado más de dos plenos para aprobar los consejos sectoriales y gracias a la insistencia de ULEG
Distinta vara de medir. El edil de ULEG, Ricardo López, invita al alcalde a "reconsiderar su postura porque es "inaceptable" el cobrar el alquiler de una sala o un teatro a una entidad inscrita en el registro municipal y más cuando, el verano pasado, Leganés alojó a miles de peregrinos durante la visita del Papa, que pernoctaron, tuvieron a su disposición los servicios públicos municipales y gastaron luz, agua y todo a coste cero y sin que el Ayuntamiento recaudara un solo euro, si bien el desembolso de las arcas públicas fue considerable. ¿Acaso existen dos varas de medir?
Por último, señalan desde ULEG que "deberíamos sacar pecho porque Leganés cuente con uno de los registros públicos de entidades, asociaciones, clubes, casas regionales, etc., más importantes de nuestra región. Sin embargo, para los partidos políticos como PSOE o PP, el bipartito que está ahogando a la sociedad española, es molesto que exista un movimiento vecinal consolidado, que se mueva y que salga a la calle a exigir a las instituciones y a sus políticos que cumplan con sus compromisos. Es evidente que ni al PP ni al PSOE les gusta que los vecinos piensen y mucho menos que actúen".
