Las sesiones plenarias son públicas por mandato legal (art. 70 LBRL), siendo un derecho del vecino asistir en vivo y en directo. Si alguien interrumpe, el alcalde puede desalojarlo, siendo la decisión de suspender un pleno y celebrarlo a puerta cerrada "matar moscas a cañonazos", una medida absolutamente desproporcionada, cobarde e ilegítima con la que pretende silenciar a la Oposición que por respeto a la democracia se opone a esta medida
El alcalde ha sido advertido de que estaría vulnerando el derecho fundamental a la participación política y que su actuación acarrearía consecuencias penales como el delito de prevaricación, sumándose su ilícito al del teniente de alcalde y edil de Obras Javier Márquez que irá al banquillo por denuncia falsa y falso testimonio contra el portavoz de ULEG.
Leganés, a 4 de noviembre de 2019.
Desde el partido independiente se sospecha que es el propio alcalde "socialista" Santiago Llorente quien está reventando los plenos o provocando esta situación anómala sabiendo que la Oposición (ULEG-PP-Unidas Podemos-VOX), como señal de protesta ante tal atropello democrático, no acude a los que se celebran a puerta cerrada. De este modo consigue silenciar toda crítica o control al gobierno. El regidor ha llegado incluso al despropósito de que se debatan y votan iniciativas de los grupos que no están presentes, algo que nunca ha pasado en Leganés en situaciones similares anteriores. "¿Se imaginan que el Congreso de los Diputados o la Asamblea de Madrid celebraran sus plenos a puerta cerrada por las protestas de la gente en la sala o que se votaran iniciativas de un partido político sin su presencia? Esto pasa en Leganés, convertido en un municipio norcoreano o de Turkmenistán".
Maniobra ilegal, ilegítima y antidemocrática. Un 155 a la Oposición.
ULEG reseña que celebrar plenos a puerta cerrada no está pensado para cuando hacen ruido unos "peligrosos" padres de escuelas infantiles o Escuela de Música, sindicalistas o personas sin techo (en las gradas no caben más de 30), sino para situaciones graves de orden público. En realidad, lo que hace el alcalde con el respaldo de la franquicia de Errejón y de Rivera es forzar situaciones para hurtar a la oposición y a los vecinos el control democrático a su gobierno. "Y siendo grave lo perpetrado es tanto o más el que se aproveche esta maniobra para debatir y votar iniciativas políticas sin estar presentes los grupos políticos proponentes. ¿Cabe mayor atropello? ¿Quién es el alcalde para disponer y asumir el control sobre mociones e iniciativas que no son suyas? Se está vulnerando el derecho fundamental a la participación política, lo que hemos hecho llegar ya al secretario del pleno alertando de las consecuencias penales, como la prevaricación, porque celebrar así los plenos a puerta cerrada es una maniobra claramente fraudulenta".
ULEG, como partido líder de la Oposición, trasladará al resto de grupos que se sumen a las medidas legales que desde la formación vecinal se están estudiando para frenar las tropelías de un alcalde y un gobierno "rodillo" que cada día que pasa es más autoritario y tiene modos más similares a los que practican dictadores:"aplica con cobardía una especie de artículo 155 a los grupos de la Oposición y a los vecinos de Leganés".